Para cualquiera que viva con miedo a que su smartphone se rompa ante la primera caída, ha salido a la venta este protector de pantallas llamado Rhino Shield, que tiene el grosor de tres folios y también resiste caidas a suelos de alfalto o de ladrillo.
Esta hecho con un polímero que es capaz de absorber los impactos 5 veces más que el Gorila Glass (utilizado en las pantallas de iPhone y Samsung).
Para demostrar su resistencia, la empresa deja caer una bola de acero de 255 gramos a una altura de 48 cm en dos móviles diferentes, uno con la lámina protectora Rhino Shield y otro que no tiene protección alguna. Mientras que el primero se mantiene exactamente igual que antes del golpe, la pantalla del segundo queda totalmente destruida.
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