El barrio Albatros
XXVII de Punta Alta amaneció manchado con sangre. Sergio Ariel Soria, un
panadero de 38 años, asesinó de varias puñaladas a su pareja, María
Esther Silva, de 28, tras mantener una fuerte discusión en la casa 250
que ambos compartían.
Personal policial de la vecina ciudad informó que todo ocurrió cerca de las 4 de la madrugada y que, aparentemente, la pelea se habría originado por una supuesta infidelidad por parte de la mujer. Ninguno de los dos tenía ningún tipo de antecedente.
Acompañado por su padre y un hermano, Soria se entregó en la comisaría local después de cometer el brutal crimen y dijo: "Tuve un inconveniente, me mandé una macana".
AVISOS
Antes del homicidio, la policía había concurrido dos veces a la vivienda por llamados al servicio de emergencias 101 que alertaban sobre disturbios en el lugar. "Sólo es una pelea”, advertía la pareja.
Personal policial de la vecina ciudad informó que todo ocurrió cerca de las 4 de la madrugada y que, aparentemente, la pelea se habría originado por una supuesta infidelidad por parte de la mujer. Ninguno de los dos tenía ningún tipo de antecedente.
Acompañado por su padre y un hermano, Soria se entregó en la comisaría local después de cometer el brutal crimen y dijo: "Tuve un inconveniente, me mandé una macana".
AVISOS
Antes del homicidio, la policía había concurrido dos veces a la vivienda por llamados al servicio de emergencias 101 que alertaban sobre disturbios en el lugar. "Sólo es una pelea”, advertía la pareja.