En la mañana de día miércoles, personal de la Cabina Bromatológica
realizó inspecciones de rutina en diferentes comercios del rubro alimenticio
con el objetivo de controlar que se respeten las normas de cadena de frío
necesarias para mantener los alimentos en perfecto estado de conservación.
En uno de los comercios céntricos se detectó en una de las
exhibidoras que expendían
fiambres, lácteos y pastas que las
mercaderías se encontraban a 18° con lo cual no las hacía aptas para el consumo
humano ya que debían estar a temperaturas inferiores a 8°, como también presencia
de productos carentes de rotulación reglamentaria, mientras que en otro
comercio se encontraron alimentos fuera de la fecha límite de consumo
(productos vencidos).
De inmediato se labraron las actas correspondientes y se
procedió al decomiso de la mercadería que no cumplía con las normas sanitarias
necesarias para su consumo, para ello se utilizan los termógrafos que miden los
niveles de temperaturas de los alimentos y detectan variaciones importantes de
temperatura a lo largo del tiempo.
Los productos decomisados fueron los siguientes:
Pastas 100Kg
Lácteos 309Kg
Fiambres 30Kg
Es importante resaltar que todas estas medidas se toman
pensando en la salud pública, ya que consumir alimentos que no guardaron la
cadena de frío necesaria puede ser muy peligroso y derivar en trastornos
severos que pongan en riesgo la vida de las personas.
Se recuerda a los comerciantes que deberán extremar las
medidas de seguridad para evitar que ocurran estos inconvenientes y de ese modo
no tener que llegar a la medida de decomiso y labrado de infracciones.
Desde la Cabina Bromatológica se llevan a cabo este tipo de inspecciones
de manera permanente intentando resguardar la salud de la población, no sólo en
los comercios de la localidad sino también en el ingreso a la misma,
controlando los transportes de sustancias alimenticias que ingresan a la
localidad